F I N

La vida se pierde en un minuto no deseado, ni siquiera encuentras un vestigio en su rastro caprichoso y fugaz. Se va así sin decir a donde, muere junto a la soledad, se apaga, se escapa en un abrir y cerrar de ojos, en una lagrima oscura y amarga.Así, al igual que el amor, va de la mano de la locura, esa que te hace reír y llorar sin saber porque, esa que te pone fuerte y te pone débil, aquella que te nace sentimientos jamás sentidos, que te vuelve cínico y dulce.Pero cuando el ocaso llega, cuando el corazón presiente el final, el alma se desespera y cae en el tedio locuaz, que ronda en la cabeza como buitres sobre la carroña y crea remordimiento, y nacen defectos que hasta el principio eran perfectos.